El pollo kung pao existe tanto en el repertorio tradicional chino como en los menús para llevar en muchas partes del mundo. Las personas que visitan Beijing, realmente se sorprenden al ver lo popular que es este platillo.
En muchos restaurantes que ofrecen comida asiática, a menudo verás el pollo kung pao en una de cada tres mesas. Estos pequeños trozos de pollo del tamaño de un bocado, son los consentidos de muchos comensales, y por buenas razones que aquí conocerás.
Además, si deseas probar una versión vegana de esta comida, existen recetas de kung pao tofu y hongos kung pao.
¿Qué es el pollo kung pao y cómo prepararlo?
El pollo kung pao es un plato con pequeños trozos de pollo cortado en cubitos, maní y chiles. Si bien este platillo se originó en la provincia de Sichuan, su fama también lo llevó a otras provincias, cada una con su propia variación regional.
El platillo también ha salido de China y sigue siendo común en los menús de comida china para llevar en países de todo el mundo.
Hay buenas razones por las que a todo el mundo le encanta el pollo kung pao. Tiene tantos sabores: picante, dulce y salado con un toque picante. El arte consiste en poner la cantidad correcta de cada ingrediente para obtener esa combinación de sabores ganadora.
En realidad, es un plato relativamente fácil de hacer en casa y aquí te diremos cómo hacerlo.
1. Comienza por tostar los cacahuates
Coloca una cucharadita de aceite en un wok y caliéntalo a fuego medio. Agrega una taza de maní crudo sin cáscara. Revuelve constantemente (o se quemarán) durante 3 minutos. Apaga el fuego y revuelve por un minuto más.
Deja enfriar. Se volverán crujientes una vez que se hayan enfriado por completo. Alternativamente, ¡puedes omitir este paso y simplemente usar maní tostado sin cáscara!
2. Marina el pollo
Mezcla el pollo con 1 cucharadita de aceite, harina de fécula de maíz y vino Shaoxing, 1/8 de una cucharadita de sal y una pizca de pimienta blanca. Deja marinar durante 20 minutos.
3. Prepara la salsa
Mezcla la salsa de soya clara, la salsa de soya oscura, el vinagre de vino de arroz, el azúcar, el agua y la harina de fécula de maíz.
4. Consigue el resto de tus ingredientes
- 3 cucharadas de aceite.
- 3 dientes de ajo, machacados y en rodajas.
- 2 rodajas finas de jengibre, picado.
- 2 chiles rojos secos, sin semillas y picados (estos pueden ser bastante picantes, así que ajústalos según tus gustos).
- 1/2 cucharadita de pimienta de Sichuan en polvo.
- 6 cebollines, solo porciones blancas, cortadas en trozos de 3/4”.
5. ¿Estás listo para cocinar pollo kung pao?
Pon un wok a fuego alto y agrega 2 cucharadas de aceite. Dora el pollo, luego sácalo del wok y colócalo en un bol. Déjalo reposar.
Baja el fuego y agrega otra cucharada de aceite. Agrega el ajo, el jengibre, los chiles, el polvo de pimienta de Sichuan y los cebollines. Cocina por uno o dos minutos hasta que esté fragante.
Vuelve a agregar el pollo al wok y ponlo a fuego a alto. Saltea durante un minuto.
Después revuelve tu salsa preparada (la harina de fécula de maíz se habrá asentado en el fondo, así que asegúrate de que esté bien incorporada). Esta salsa es tan deliciosa como la salsa bbq o la salsa de habanero.
Agrega la salsa al wok y sofríe por un minuto más. La salsa debe espesarse muy rápido. Finalmente, agrega los cacahuates. Revuelve todo y sirve. ¡Y listo!